Hoy más que nunca UNIDOS y SOLIDARIOS, que hermoso honor y honra que tenemos los bioquímicos de aferrarnos a ellas, dice San Agustín «Si precisas una mano recuerda tengo dos». Hoy nos llegó de un país muy lejano, que entro silencioso y escondido un virus casi desconocido que nos hizo recordar el término «pandemia», pero quienes fueron los primeros en detectarlos han sido nuestros colegas ratificando al mundo el conocimiento de la importancia del ser BIOQUIMICOS. Afianzando los principios que consolidan nuestra formación «Sin análisis no hay diagnostico»; sin diagnóstico es imposible detectar y aislar a los pacientes infectados y sin nuestro aval es imposible el seguimiento de la patología, especialmente en los pacientes críticos. Reconocer al colega es nuestra obligación, es el gladiador desapercibido por su humildad que trabaja al mismo que otros trabajadores de la salud, denodadamente y sin descanso, alejados de su familia y afrontando situaciones límites producto de la escasez de los recursos.
Como siempre nuestra obligación es visibilizar y valorizar las tareas de los Bioquímicos, todos UNIDOS con esa pasión cotidiana y responsable de mejorar la salud de la población. Esta crisis, nos demostró cuan alejados de una realidad vivíamos, en un mundo ficticio. Dice el Papa Francisco «Nos sorprendió una tormenta y en esta barca estamos todos, frágiles y desorientados», para encontrar un mundo nuevo y real depongamos de la soberbia, de la avaricia, de la lujuria, de la ira, de la gula, de la envidia y salgamos de la pereza. Es por ello y desde aquí queremos hacer llegar un reconocimiento y una distinción especial para todos los colegas que se pusieron el delantal en esta lucha desigual.
A ESTA BATALLA LA GANAREMOS ENTRE TODOS UNIDOS.
Honorable Consejo Directivo